HAGAMOS LA PAZ Y NO LA GUERRA

Nunca las estadísticas han pesado menos. Cuando el corazón late tan fuerte no se escucha la voz de la sensatez. El equilibrio pierde ante los sueños más sublimes de una clasificación a todas luces complicada. Visitar La Paz nunca fue tan cómodo como hoy es lo que se escucha en la calle. Suena bonito.


Argumentos para la aventura altiplánica tenemos. El coraje demostrado en las fechas anteriores no puede verse mermado por la emoción mediática. La actitud guerrera, esa de ganar las pelotas dividas será fundamental en el Hernando Siles. El orden de los partidos anteriores no se puede perder. "La pelota no dobla en la altura" rezó una vez Pasarella. Mensaje para los centrales. Zambrano nunca jugó en estas condiciones. Calidad le sobra, pero vamos a ver como le va. Vilchez tiene recorrido y buena asimilación de la altitud. Sin Solano perdemos en la entrega del balón y en esa bendita pelota parada que en el ABC del fútbol de altura se ubica en primer lugar. Con Mariño ganamos en otro tipo de desequilibrio. El "burrito" la lleva más pegada al pie. Otra de nuestras fortalezas no será frecuente. Vargas no podrá ir tanto porque se debe dosificar sus incursiones. Hacer un partido correcto supone ser ordenados defensivamente. Administrar nuestra energía de manera inteligente cuando se ataque. Y en lo posible definir las pocas que se generen. Cuidado con las amarillas. Perú hasta el partido contra Argentina sostuvo el ritmo de exigencia de medio campo con Torres y De la Haza. Generó poco pero soportó y mató cuando tuvo que hacerlo. Fano era uno antes de Perú - Argentina. Hoy esperamos que sea el mismo peleador sin ley. Si Perú tiene el mismo concepto de "somos un equipo chico y tenemos que ir de a pocos", crece en posibilidades.


Al frente no tenemos cualquier selección. Es la última de la Eliminatoria pero nosotros seguimos siendo penúltimos. No hemos ganado nada saliendo de Lima. Ellos vienen de empatar en Río de Janeiro nada menos. Y una de sus víctimas en La Paz fue el mejor equipo de este proceso. Aquella vez fue Bolivia 4 Paraguay 2. Entonces quedamos en que el rival no es pan comido. A eso agregemos que nunca le ganamos a Bolivia por una Eliminatoria y nuestra referencia es aquel partido del 96 empatado a cero con Oblitas en el banco y German Carty desperdiciando lo que pudo ser nuestra única victoria. Los dirigidos por "Platini" son un equipo blandito pero con fútbol. De esos que tratan bien el balón y te hacen daño cuando no entran al cuerpo a cuerpo. Son rápidos, pero con poca potencia. Por arriba no son contundentes pero tienen en Joselito Vaca a un factor de desequilibrio con el balón del medio hacia adelante. Defensivamente Raldes es un defensa que ofrece garantía pero en bloque no son sólidos. El "Nacho" García es un volante con trajín y buen pie. Adelante Martins es el punta referencia para meter miedo y Joaquin Botero no esta tan rápido como antes pero maneja el concepto de hacer daño cuando esta cómodo. No son un gran equipo pero tienen propuesta. Pero sobretodo, son parte de un trabajo que comenzó antes de la Copa América.


¿Una ilusión renovada?. Puede ser. Todavía no podemos ver la clasificación. No estamos autorizados. Hay que ir a buscarlo. Pero con inteligencia. Según el ranking de la FIFA hemos subido 15 puestos. Mejor aprovechemos la tranquilidad de Tacna y busquemos La Paz con optimismo que la Asunción en la tabla vendrá casi por añadidura. Cuatro de seis que le dicen. Veremos.